¿Nunca habéis tenido uno de esos días en qué todo te sale mal? Esos días grises y que parece que el mundo se ha vuelto contra ti y no sabes el porque. Esos días en que te toca levantarte temprano para ir al colegio, instituto, trabajo… y tener que estar con una puta sonrisa para que los demás no se den cuenta de que tú estas mal y no tienes ganas de tonterías y tienes que soportar a gente que no tienes por que soportar. Esos días en que te pones a reflexionar sobre tu vida y piensas “joder, vaya asco de día” que estas deseando de que llegué la noche para que acabe. Si esos días tan odiosos, que parece que no tienen fin.